En toda zona de guerra siempre hay reporteros que nos abren la ventana al horror, para que, acomodados en nuestro sillón seamos testigos de las atrocidades que se cometen a miles de kilómetros. Pero también existe un territorio comanche a pocos metros de nuestro hogar; un lugar donde no se pueden acreditar periodistas o fotógrafos; un espacio donde a diario hay víctimas. Unas mortales, otras no. Muchas sufren en silencio y pocas no.
2 comentarios:
Mujeres, hombres y niños, víctimas de una locura por la violencia. Es todo producto de una sociedad competitiva y arrolladora que deja a la persona bajo mínimos sociales. Tantas normas y prohibiciones que en el marco de una hogar sueltan su furia contra los más débiles. Violencia física, discusiones, estados de ansiedad y alertas disparadas por una pequeña insinuación. Son nuestras luchas contra lo que no queremos y nos sometemos cada día.
Luchar contra lo que no quieres es la paz, la tranquilidad y el bienestar del hogar.
Creo que com pocas palabras se define esta situacion "LAMENTABLE"....,pero javi, no solo son los hombres los que dan golpes,no crees? vamos a ser justos, y no tiremos tantas piedras a nuestro tejado, que el nuestro tambien tiene tejas rotas.
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